Restaurante de comida del Atlántico Medio de Estados Unidos

Comida casera , un buen cocinero, y atentos a todo, buen sitio para comer en el centro.El miércoles callos y cocido.

Excelente bar. Raciones a saco. Bien cocinadas y servidas. Precios razonables y personal atento y amable

Fui a la hora de comer y me empecé a arrepentir nada más entrar. El local se ve viejo y sucio, sólo unos borrachos que había allí jugando a la tragaperras se podrían sentir cómodos. La camarera estaba sentada en una mesa, supongo que con unos amigos tomando algo y no tenía ninguna gana de atenderme hasta que miré como buscando quién atendía allí y ahí sí me atendió educadamente. No tenían pan y tuvo que salir a comprarlo. Tras el primer bocado al bocadillo de jamón asado que cómpre decidí tirarlo a la basura, estaba duro y no tenía buena pinta, tal vez no estuviese malo, pero preferí no arriesgar. No recomiendo ni entrar. Me sorprendería que dure mucho tiempo más abierto.

Después de ver buenos comentarios decidimos ir ayer a probar y quedamos muy contentos. Comimos cocido y de postre unas tartas muy ricas. Cantidad perfecta para los dos y buen precio. Además el cocido para mí gusto tenía su tiempo de cocción ideal. El trato genial, muy atentos. Volveremos.

Estuvimos comiendo de menú y todo delicioso y con buena cantidad.

Siempre ha estado muy bien este sitio con productos de calidad como por ejemplo el pulpo que lo hacen buenisimo o los chipirones de la ria a la plancha. Desde que amplio el negocio ya no es lo de antes, mas caro y menos calidad, pero sigue siendo recomendable.

Local muy dejado y sucio, atención malisima. En la carta pone que las raciones son caseras como por ejemplo las croquetas, sin embargo son congeladas. Muchos género de la carta no tienen y para colmo al ir a cobrarnos nos dicen que son 42 € y al pedir la cuenta finalmente se convierten en 30€. No lo recomiendo en absoluto y no entiendo las reseñas buenas que tienen.

Estuvimos 18 a cenar hace unos días y el trato fue excelente. La comida exquisita y abundante. No hay queja posible. Para la próxima cena ya avisamos a la dueña que cuente con nosotros. La limpieza impecable. Lo dicho. Sin duda yo vuelvo.

De esos bares de tapas dónde comes muy muy bien, te sientes muy muy a gusto, y te relajas allí en su terraza sin ninguna pretensión , las tapas están buenísimas sobre todo las croquetas de chipirón